Quinta caracteristica de un Verdadero Cristiano- 2

Quiero aun llamar tu atencion sobre los adversarios que Satanas emplea para resistirte.

jesus.jpg

¿Que clase de hombre son estos?  ¡Los religiosos!  Los mayores enemigos de Jesucristo, cuando anduvo en esta tierra, no siempre fueron los pecadores; al contrario siempre estaba rodeado de ellos.  Sus anemigos mas fanaticos fueron los religiosos.

Finalmente, Le clavaron en la cruz.  Hoy ocurre exactamente lo mismo.  Hermano, hermana, en la mayoria de los casos tendreis que padecer desprecio por parte de los cristianos sin Cristo. A estos les quisiera decir: «Queridos amigos, ¿sabeis adonde vais?

Vuestro cristianismo «de sofa» conviene al diablo.  Si no llagais al nuevo nacimiento, es decir, a la renovacion verdadera del corazon, una dia pertenecereis eternamente a Satanas, el enemigo de vuestras almas. Puede ser, querido lector, que aun no entiendas bien esto, pero te ayudara entonces el siguiente acontecimiento:  El evangelista Moody conto acerca de un negro creyente. Era esclavo.  Un dia tuvo que acompañar a su amo a cazar patos.  Este era incredulo y se enojaba por su esclavo callado y piadoso. Caminando, se burlaba de el diciendole: «Cuando me hablaste una vez de tu Jesus, me dijiste tambien que Satanas te estaba tentando horriblemente.  No comprendo bien esto.  A mi, a quien tu llamas incredulo, y que por tanto petenezco al diablo, el no me molesta asi».  Nuestro hermano negro suplico interiormente al Señor que le diera sabiduria para contestar correctamente.  Antes de poder hacerlo, paso una bandada de patos.  El amo disparo y algunos fueron alcanzados y cayeron. «Pronto», grito el amo, «apresurate a recoger los patos que aun estan vivos, para que no se escapen; deja los muertos, ya que estos, de todos modos, los tengo».  El negro cumplio la orden y volvio con algunos patos, heridos y resitentes, en la mano.  Entonces dijo a su amo:

«Señor, acabas de preguntarme por que el diablo me tienta a mi y no a ti.  Me parece que ahora me has mandado hacer exactamente lo que el diablo ordena a sus ayudantes: «¡Pronto!, apresurate a recoger los vivos, pues a los muertos, de todos modos, los tengo». ¡Oh, hombre! Jesus te ama. ¡Dejate salvar antes que sea demasiado tarde para siempre!

¿Qué Opinas?

Comentarios