¿Porque debo confiar en Dios?
Vivimos en un mundo lleno de problemas, de situaciones horribles, noticias terribles, asesinatos, catástrofes, guerras, etc. En un mundo así, cualquiera se trauma, se desanima, se entristece y sobretodo se vuelve desconfiado de todo y de todos.
Pero aún queda esa esperanza para quienes verdaderamente necesitamos de alguien en quien confiar, y que sabemos que nos va a ayudar y no nos defraudara jamás. Y ese alguien es Dios. ¿Pero, por qué entonces debemos confiar en Él?
Dios es Omnisciente. Nuestro Señor sabe perfectamente lo que nos está pasando en este momento. Sabe de nuestras preocupaciones, enfermedades, la rebeldía de nuestros hijos, de la falta de trabajo, de los problemas económicos, de la extorsión, etc. Él lo sabe todo, porque tiene conocimiento de todo: Oh Jehová, tú me has examinado y conocido.
Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. (Salmos 139:1-3) El Señor conoce todo de nosotros, porque somos creación suya, por lo tanto confiemos en que él tiene la solución al problema que estamos enfrentando.
Dios es Omnipotente: A parte que Dios conoce todas las cosas, también tiene el poder absoluto sobre todo, y nada está fuera de su control. Dios siempre usara su poder para cumplir su voluntad en nosotros: Yo conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento que se esconda de ti. (Job 42:2) El poder de Dios se hace manifiesto cuando humildemente aceptamos que necesitamos de su ayuda. Dios siempre llevara a cabo su plan en nuestras vidas, de nosotros depende que tan largo y doloroso sea.
DIOS ES VERAZ: Nuestro Señor jamás nos mentira, ni jamás dejara de cumplir ninguna de sus promesas en nuestra vida. Dios no puede mentir y su Palabra lo confirma: De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso; como está escrito: Para que seas justificado en tus palabras, y venzas cuando fueres juzgado. (Rom. 3:4) Dios es fiel en cumplir lo que promete; en él no hay falsedad. Toda respuesta debe esperarse en el Señor solamente, él sabe en qué momento nos la responderá y de la manera que lo hará, nuestra tarea es confiar solamente.